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Investigación empírica

Variable Medias M. C inter F Significación supone un factor de desviación social para dichos sujetos. Esta
es la línea coincidente con los estudios de Bandura (1976), o
antipatía < 1 hora: 0.12 0.045 2.735 .042
mucho más recientemente de Christakis (2009).
(ant) < 2 horas: 0.05
< 3 horas: 0.08
< 4 horas: 0.18 Que la televisión crea una cultura, un imaginario social, su-
> 4horas: 0.22 pone un aprendizaje conjunto, implica una visión del mundo,
status < 1 hora: 0.05 0.120 2.947 .032 y por lo tanto aquellos niños que apenas ven la televisión son,
sociométrico < 2 horas: 0.14 al igual que los anteriores, rechazados por el grupo. Es decir,
(ss) < 3 horas:0.06 los niños de nuestra época son socializados por la televisión,
< 4 horas: -0.04 y el que no posee ese aprendizaje es un menor desintegrado y
> 4horas: -0.15
rechazado. Esta idea ya fue expuesta clásicamente por Gerb-
ner (1972, 1979), y posteriormente fue defendida por Roda
Respecto al criterio de trabajo, los resultados indican algo si-
(1989), entre muchos otros.
milar, si bien con un matiz añadido: además de resultar signi-
ficativas las tres variables anteriores, también lo era la percep-
Por lo tanto, frente a la idea de que el visionado televisivo es
ción acertada de rechazos (la predicción que hace cada sujeto
negativo, debe abrirse camino en nuestras sociedades la noción
de por quién va a ser rechazado (es decir, bajo el criterio de
de que hoy en día, un menor que no visione la televisión será
trabajo, el mayor visionado de la televisión, también hace que
un desadaptado, de igual manera que un menor que visione
los sujetos predigan mejor por quiénes van a ser rechazados, y
excesivamente la misma. Es decir, hoy en día el problema de la
de nuevo de igual manera, dicho resultado se obtiene con los
adaptación social de los menores (no de su rendimiento esco-
sujetos que menos visionan la televisión.
lar, que no ha sido estudiado en esta investigación) no reside
en que visionen mucha o poca televisión, sino en que “con-
suman” televisión en el grado en que la sociedad sitúa dicho
comportamiento. Y es que, parafraseando al filósofo Ortega
y Gasset, se podría afirmar que cada sociedad tiene el tipo de
niños que se merece; ni mejores, ni peores.

Por lo tanto, podemos afirmar que el número de horas de vi-
sionado de televisión implica que se creen en el aula diferentes
interacciones sociales, específicamente en Estatus de rechazos
(Sr), en Antipatía (Ant) y en Estatus Sociométrico (SS). Ade-
más, si el criterio es de trabajo en lugar de lúdico, también se ve
afectado el índice de Percepción Acertada de Rechazos (Par).

conclusiones y discusión

Las hipótesis que se habían planteado en este estudio se ven
cumplidas, ya que los resultados avalan dos hechos impor-
tantes:

Que la televisión afecta negativamente a la calidad de las
interacciones sociales que se producen entre los niños en al
ámbito escolar, de forma que los índices más negativos, así
como aquellos que se pueden interpretar en clave negativa, se
manifiestan en los sujetos que han sido expuestos a un núme-
ro mayor de horas de visionado; es decir, la televisión “daña”,
las interacciones sociales reales, hace que los sujetos que más
la visionan sean más rechazados por el grupo, y por lo tanto

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