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Seres aparentemente normales que se convierten en Desde Columbine hasta los recientes sucesos de
asesinos en masa. Vidas triviales banalmente segadas por un Kauhayoki en Finlandia se vienen repitiendo actos violentos
ciudadano al que nadie prestaba atención. Que nadie piense que se ofrecen a la opinión pública como misteriosos, o
que está al abrigo de esta violencia. aparentemente incomprensibles.

El genocidio nazi practicado por la nación más Sin embargo, el análisis científico de lo que es la
avanzada de la tierra de su época, las matanzas masivas de violencia nos confirma que esta tiene un origen mucho más
civiles a manos de sus vecinos de Ruanda y Burundi en los trivial en el mecanismo mimético y en el narcisismo social que
años noventa, o las más recientes barbaries y atrocidades en nos invade y que dicta a cada uno que, en esta sociedad, para
el corazón de Europa, en los territorios de la antigua ser alguien relevante, se requiere ser notorio y famoso.
Yugoslavia, nos señalan una y otra vez lo mismo: personas
totalmente normales como cualquiera de nosotros pueden, Internet y You Tube no hacen sino reforzar y
bajo ciertas circunstancias, verse inmersas en la comisión de exacerbar todo el proceso mimético. Las nuevas tecnologías
actos de violencia extrema. Basta que concurran ciertas hacen del mundo un inmenso espejo en el que cada uno se
condiciones. pregunta mientras se contempla en él: “Quien soy yo para los
demás”.
Los violentos asesinatos de Finlandia perpetrados
por jóvenes contra otros jóvenes nos pueden llevan a la Es cierto que todo el mundo clama contra la
reflexión recurrentemente estéril acerca de los “violentos” violencia en un mundo cada vez más escandalizado por sus
como seres pervertidos de raíz, o como patologías reencarnaciones periódicas: contra las guerras modernas, que
psiquiátricas descontroladas, que simplemente, se nos han concitan manifestaciones multitudinarias de condena como
ido de la mano. una alternativa que ya no es éticamente asumible, y contra la

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