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Articulado
               3.      Su situación en el momento de la toma de la  criterios que tienen que ver con la relación entre juventud,
        decisión. El resultado, el balance de las experiencias vividas,  procesos migratorios y derechos humanos.
        de la tutela prestada, de las ayudas recibidas (son o desean ser
        en función de cómo se les ha atendido aquí).                 En la mirada de unos al haber comprobado que
                                                              estaban de más en la sociedad a la que habían llegado y en las
               4.      La escucha de sus intereses y vivencias. Su  imágenes de las revueltas de otros que, aun habiendo nacido
        decisión sobre donde quiere continuar su vida (no es posible  en el país, descubren la falsa aceptación de su juventud,
        retornar  a  un adolescente sin convencerlo, sin valorar c  considerada dos generaciones después todavía diferente,
        onjuntamente que esa es la mejor opción para su vida ahora,  afloraba de nuevo su pregunta vital impertinente: “¿por qué
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        sin conseguir que la asuma como propia ) .            no puedo convertirme en un ser humano suficientemente
                                                              feliz, ser considerado uno más entre otros de esta sociedad,
               5.      Facilitarle  un  defensor  legal  con  el  que  tener posibilidades de imaginarme en el futuro, sabiendo
        pueda contar para recurrir las decisiones de la Administración  quien  soy  en  el  presente,  formado  parte  de  alguna
        con las que no esté de acuerdo (Tutelar o no, tramitar o no  comunidad, de algún proyecto compartido con otros?”.
        determinados  papeles,  regularizar  su  situación,  ser
        repatriado, etc. son actos administrativos que la personas   En  los  primeros  esa  pregunta­ vivencia­ acción
        adultas poden discutir y recurrir legalmente. En cambio, un  seguramente había surgido antes del proceso migratorio y,
        menor no puede hacerlo, ya que se supone que está bajo la  hasta no hace mucho, tenía respuestas concretas en un marco
        tutela de un adulto, pero, si está solo, no puede discutir  vital acotado en el que la construcción personal tenía unos
        nada).                                                parámetros socialmente definidos. Pero, la globalidad de la
                                                              parabólica, Internet y el mercado modificó esos parámetros.
               Retornarlos o no retornarlos no depende del grado  Ya  no  se  trata  de  intentar  tener  infancia  (adolescencia,
        de “humanidad” política que decidamos tener, sino de la  juventud)  en  medio  de  pobrezas  y  limitaciones.  Ahora,
        obligación  de  cumplir  las  leyes.  Primero  cumplir  la  además, se trata de intentarlo en un contexto en el que el
        Convención, después las leyes de protección de la infancia,  diseño del futuro no pasa por lo que uno tiene o no tiene,
        luego la leyes migratorias.                           sino por lo que ve que otros tienen y parece accesible (o no
                                                              hay razones para que no lo sea).
              10. El derecho a un grado minimo de
        10. El derecho a un grado minino de humanidad, especial ­
          humanidad, especialmente cuando lo que se
        mente cuando lo que se busca es el derecho a tener futuro    Las  posibilidades,  aunque  sean  mínimas  e
               busca es el derecho a tener futuro
                                                              hipotéticas,  se  han  colado  en  su  propio  mundo  como
               He  estado  a  lo  largo  de  mi  vida  profesional  en  elementos  de  otros  sueños  posibles.  El  repertorio  de
        cárceles, centros de menores complicados, con chicos que  hipótesis  vitales  cambia  y  emigrar  se  convierte  en  una
        cumplían pena o que estaban protegidos sin saber muy bien  necesidad.  Cuando  esa  secuencia,  entre  el  entorno
        qué pasaba en sus vidas, pero, pocas veces he tenido la  empobrecido y limitado y “el dorado” posible, se pone en
        sensación de desconcierto y desesperanza que me invadió, a  marcha  y  les  trae  entre  nosotros,  comienza  esa  especie
        finales de 2006, visitando un albergue provisional para los  de segunda parte de sus vidas (tercera, cuarta o enésima entre
        adolescentes  subsharianos  que  llegaban  a  las  playas  de  los  adolescentes  franceses  “revueltos”)  de  la  que  vengo
        Tenerife. Pocas veces he quedado tan impactado por una  hablando y en la que encuentran primero la negación a
        mirada como cuando recibí las de aquel largo centenar de  abrirles  la  puerta,  después  la  aceptación  resignada  por
        menores de edad y mayores de vida, abatidos de tanto esperar  mandato legal pero escasamente acogedora, finalmente la
        algún futuro para su historia.                        integración marginal y segregadora.


               La vivencia de este último episodio “emigrante”, así  La relectura de los derechos de los derechos de la
        como otros encuentros profesionales anteriores a propósito  infancia  en  clave  adolescentes  emigrantes  solos  se  debe
        de las confrontaciones y violencias que se produjeron meses  concretar (después de considerarlos como personas que
        antes en las periferias de algunas ciudades francesas, que  están dentro del periodo legal de la infancia) en:
        tenían como protagonistas adolescentes y jóvenes con un
        pasado familiar asociado a la inmigración, me llevó entonces  •  El derecho a la supervivencia en condiciones dignas
        y me lleva ahora, para acabar este texto, a recordar algunos  (a no convertirse en los nuevos habitantes permanentes de la
                                                              calle)
                7 En las crisis de 2005 y 2006 las administraciones responsables de la protección llegaron a indicar a las entidades que gestionaban los recursos de acogida la obligación
          de proponer un porcentaje alto (superior segun algunas al 50%) de medidas de retorno de menores a su país. Alguna ONG muy conocida decidió renunciar a la gestión de algún
          centro para no ser complice de ese tipo de vulneración de los derechos de la infancia y de la leyes de protección.
                8 Los profesionales de entidades como “El Casal dels Infants del Raval”, en Barcelona, que trabajan con estos chicos afirman reiteradamente que, para que el retorno
          sea positivo tienen que basarse primero en un experiencia provisional, bien acompañada, acordada con el adolescente, para hacer algo en el lugar de origenm con la posibilidad
          de volver a España si no funciona.

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