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Infancia, Juventud y Ley
es más que el resultado de “la Ello no es casual; sino que, labilidad y la emotividad. Esta
existencia de una pluralidad a nuestro entender, responde figura de “individuo flotante”
de mundos sociales” como también a factores sociales ha de ponerse en relación
afirma Gergen (op. cit.). En presentes en el capitalismo con la obra de autores tales
cualquier caso sí que es cierto tardío. como Gustavo Bueno (1981),
que en un mundo como el Marino Pérez (1992) y Juan B.
postmoderno, es detestable En este marco es evidente que la Fuentes (1994).
“una atmósfera de bufonada lucha por el reconocimiento no
irónica”, todo intento de desaparece, más exactamente La propia dinámica de
autenticidad o toda búsqueda se privatiza, manifestándose la movilidad convierte,
sincera de una finalidad prioritariamente en los igualmente, a las personas
se torna vacía (Gergen, circuitos íntimos, en los en expertos creadores de
op. cit., p. 247). Cuando problemas relacionales; el impresiones en otros. Con
se ha advertido que “toda deseo de reconocimiento ha la movilidad uno siente la
tentativa de “decir la verdad”, sido colonizado por la lógica tentación de inventarse,
de sensatez, penetración, narcisista, se vuelve cada vez de crear en el otro aquella
inteligencia o profundidad, es menos competitivo, cada vez impresión que deseamos que
una construcción lingüística más estético, erótico, afectivo. tenga de nosotros (DePaulo
prestada, ambigua y acosada & Kashy, 1998). Ello tiene
por factores ideológicos [...] El conflicto de las conciencias especial importancia en las
palidece hasta la crítica seria” se personaliza, está más en nuevas tecnologías de relación,
(Gergen, op. cit. p. 181). juego el deseo de complacer, tales como Internet, los Chat’s,
seducir durante el mayor MUD, IRC’s, etc. Los MUD, por
En definitiva, la distinción tiempo posible que el de ejemplo, proporcionan mundos
entre la verdad y la mentira clasificación social; también para una interacción social
(en su aspecto cotidiano) se el deseo de ser escuchado, anónima en la que podemos
va volviendo paulatinamente aceptado, tranquilizado, jugar un papel tan cercano o
una cuestión más borrosa. Lo amado. Es por eso por lo que tan alejado a nuestro yo real
verdadero deviene falso y lo la agresividad de los seres, según elijamos (Turkle, 1997,
falso verdadero; o mejor, la el dominio y la servidumbre p.233).
actitud burlona del discurso se dan actualmente no tanto
postmoderno hace que no sea en las relaciones y conflictos Estos nuevos dominios de
posible ya hablar de verdad sociales como en las relaciones la comunicación “difuminan
y de mentira. Sólo existen sentimentales de persona a las fronteras entre el yo y el
opiniones. El discurso acaba persona (Lipovetsky, 1998, p. juego, el yo y el rol, el yo y
siendo una mera cuestión de 71). Es justamente en este la simulación. Quiere esto
referencias internas, de juego. campo en el que se ha venido decir que las nuevas formas
Son los “juegos del lenguaje”. a desarrollar lo que Giddens de interacción (de las que los
Simular ya no es mentir. (1995, 1998) denomina medios informáticos son sólo
Y no lo es porque mentir “relación pura”. un ejemplo al que cabe añadir
supone aceptar, aunque sea otras formas de comunicación
tácitamente, que existen cosas Consecuencia del abandono desvinculadas del espacio
independientes de los signos de las grandes finalidades como, por ejemplo, la telefonía
(Pinillos, 1997). sociales y de la preeminencia móvil, o la creciente rapidez
concedida al presente -nos de los medios de transporte,
Un segundo punto a considerar dice Lipovetsky, 1983/1998, etc.) favorecen a un individuo
trataría de la “privatización p. 209-, el neonarcisismo es experto en manejar las
de la mentira”. La mentira ha una personalidad flotante, sin impresiones que genera sobre
acabado convirtiéndose en un estructura ni voluntad, siendo los demás y, además, con
asunto básicamente privado. sus mayores características la un tipo de interacción social
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