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Investigación empírica
xual, son motivo de preocupación ya que éste es un indicador que 3. Factores del entorno
presentan dificultades o incapacidad para ajustarse a las normas.
Con relación a los factores del entorno positivos nos hemos
Al referirnos a este ítem no contemplamos la conducta abusi- centrado en aquellas situaciones que favorecen la interacción
va que causó la derivación al programa. social frente al aislamiento social. Por lo que señalamos aquellos
casos en los que el menor tiene al menos una persona en la que
Más de la mitad de nuestra muestra, un 54%, había recono-
poder confiar y contar sus preocupaciones que pueda ayudarlo a
cido la expulsión de centros escolares por comportamientos
modelar valores y comportamientos sociales facilitando que se
problemáticos (peleas con los compañeros, agresiones entre
pueda sentir emocional y físicamente seguro en su entorno ha-
iguales, incumplimientos graves de la normativa escolar…).
bitual, lo que parece reducir la probabilidad de cometer nuevos
delitos de abuso sexual como indican las investigaciones exis-
Hay estudios que informan que la expulsión de la escuela es
tentes (Walsh, 1996 citado en Print et al., 2007).
relativamente común en la historia de jóvenes y adultos que
abusan sexualmente (Challen y Walton, 2003 citado en Print et
En relación a estos ítems el 42’11% manifiestan sentirse segu-
al., 2007), así como que la inestabilidad en la escuela, incluyendo
ros emocional y físicamente en su entorno habitual y disponer
la expulsión, es un indicador de reincidencia sexual en adoles-
de una persona en la que pueden confiar, frente al 57’89% que
centes (Prentky y Righthand, 2003 citado en Print et al., 2007).
no cuenta con estos factores protectores.
3. Referidos a factores protectores.
1. La conducta abusiva parece estar influenciada por el grupo de iguales. 4. datos referidos al tratamiento
En este ítem valoramos aquellos casos donde los comporta-
mientos abusivos se han realizado bajo la presión del grupo de 1. Admisión de los hechos
compañeros. En estos casos el menor atendido no ha sido el
iniciador y se han visto implicados otros menores o jóvenes. Así El reconocimiento de las conductas sexuales inadecuadas es un
mismo la motivación para cometer los abusos está más relacio- factor que facilita el proceso de intervención y la asunción de res-
nada con la presión de grupo que con un impulso sexual inicial. ponsabilidades por parte de los menores y sus familias, siendo un
factor protector ante la comisión de nuevas conductas abusivas.
Los menores que puntúan en este ítem suelen ser más vulne-
rables a la presión de grupo o a las coacciones y así lo mani- En nuestra experiencia el 60 % de los menores y jóvenes aten-
fiestan los cuidadores y profesionales que conocen al menor. didos admitieron desde el principio los hechos por los que
habían sido derivados a nuestro programa, en un 14 % de los
En nuestro caso en un tercio (33,3%) de los casos atendidos casos solo pudieron admitir parte de los hechos por los que
la conducta abusiva parece estar influenciada por el grupo de habían sido condenados y un 26% se mantuvo durante todo el
iguales frente al 66’7% en los que los comportamientos abusi- proceso en la negación de los mismos.
vos se llevan a cabo en solitario, sin influencias externas.
Desde nuestro modelo de intervención, el no reconocimien-
En los casos en los que los comportamientos abusivos se rea-
to no supone que no se lleve a cabo una intervención con el
lizan en grupo o por la presión de iguales, la motivación de
menor y su familia, ya que se abordan todos aquellos factores
éstos puede estar más relacionada con complacer al grupo y
de riesgo y factores de protección dinámicos que inciden en
conseguir el reconocimiento, respeto y la pertenencia al mismo
la reducción de futuras conductas problemáticas y facilitan un
que con una motivación sexual como factor principal, lo que
estilo de vida positivo sin abusos.
supone un menor riesgo de reincidencia futura en conductas
sexualmente abusivas.
2. Factores de desarrollo
En los factores de desarrollo positivo, los estudios señalan que
disponer de habilidades de negociación y resolución de pro-
blemas y/o ser capaz de plantearse metas con planes de futuro
positivos y realistas se consideran factores que promueven la
resiliencia y reducen el riesgo de reincidencia.
Estas habilidades de negociación y resolución de problemas se
relacionan con la reducción de las tasas de reincidencia infrac-
tora al facilitar la adquisición de competencias y la capacidad
para mantener límites seguros, distinguiendo entre relaciones
seguras y peligrosas ( Henry et alt.,2001 y Ward y Steward,
2003 citado en Print et al., 2007).
En nuestro caso el 57’89% puntúan en estos ítems frente al
42’11% que presentan dificultades en estas áreas.
64 Infancia, Juventud y Ley