Page 1 - Boletín Psicología y Salud

El Programa de Asistencia Psicológica te ofrece el boletín de Salud y Psicología, aportando información para mejorar la
calidad de vida tanto en el ámbito profesional como personal.

Convertir los problemas
en Oportunidades

Los problemas pueden ser o bien un muro que te
frene y te paralice o bien servirte de trampolín para
superarte y seguir adelante con más fuerzas todavía.
Todo depende de tu actitud ante la vida, de tu forma
de ver las cosas y de la manera en que enfrentas
estos problemas.
A lo largo de nuestra vida nos enfrentamos a muchas
situaciones difíciles y adversas que llegan sin avisar y
ante las que a veces resulta complicado saber cómo
reaccionar. Sin embargo, la manera en que
afrontamos estas situaciones es lo que nos ayudará a
superarlas y a salir fortalecidos de ellas.
Por eso, os explicamos unas estrategias para encarar mejor los problemas y ser capaces de
transformarlos en oportunidades que nos permitan crecer personal e internamente en vez de
frenarnos y limitarnos.

1. Desarrollar una reflexión adaptativa
Cuando nos sobreviene un problema es inevitable y normal preocuparse y sentirse abrumado. La
clave está en que esa preocupación sea saludable y no excesiva (e inútil). Cuando nos preocupamos
en exceso perdemos la perspectiva, nos bloqueamos y no sabemos cómo actuar. Por ello, debemos
llevar a cabo una reflexión adaptativa del problema y no una rumiación desadaptativa.

2. Mantener la mente en calma
Parece muy obvio, pero cuando tenemos la mente relajada y en calma es cuando el cerebro
desarrolla conexiones cerebrales más profundas que nos permiten buscar las mejores soluciones al
problema. Es importante que cuando nos sobrevenga el problema lo aceptemos, nos demos tiempo
para asimilarlo y mantengamos la calma en todo momento para ser más productivos y efectivos.

3. Entender el problema
¿Por qué está sucediendo? ¿Qué ha sido el detonante del problema? ¿Qué puedo hacer para
solucionarlo? Uno de los aspectos más importantes es ser capaces de reflexionar para identificar el
problema y cuáles sus causas porque solo así encontraremos las soluciones. Se trata de llegar a lo
más profundo y analizar todo aquello que creamos que nos lo puede estar causando hasta que al
final lleguemos al fondo del asunto y encontremos el detonante real.

4. Aprender a aceptar
Tanto si existe una solución como si no, debemos aprender a aceptar las situaciones que nos
vengan. Solo si las aceptamos y no las negamos entendemos que son reales y que debemos buscar
cómo resolverlas. Y aunque a veces hay situaciones ante las que no podemos hacer nada y no está
en nuestra mano resolverlas, de todas ellas nos habilitan en el camino de la vida y nos enseñan algo
que nos ayuda a ser mejores.

Sea como sea cada uno tenemos el poder de convertir nuestros problemas en oportunidades
dependiendo de nuestra actitud ante ellos. Todo podemos elegir cómo nos afectan las cosas y el
efecto que tendrán en nuestro día a día y en nuestra vida en general.

Programa de Asistencia Psicológica al Empleado